Después de un desafortunado golpe o impacto, en ocasiones (muy pocas por suerte), se producen daños en la bici, con el inevitable disgusto para su propietario. Y es entonces cuando en Uves Bikes ponemos toda la maquinaria en marcha para minimizar, en lo posible, ese mal trago.
Otras veces nuestros clientes simplemente desean cambiar la decoración de su bicicleta, pintarla, para renovar su imagen o devolver la pintura al estado que tenía cuando la estrenaron. Para nosotros cada proyecto es único y lo afrontamos con un gran entusiasmo, desde la primera llamada hasta que entregamos el material a su propietario.
Poco a poco, las mejores tiendas del sector empezaron a ver en Uves Bikes un buen aliado para ofrecer nuestros servicios y productos a sus clientes y, de esta forma, se fue tejiendo toda una red de colaboradores de la que nos sentimos muy orgullosos.
Han sido muchos años de gratificante trabajo, duro en ocasiones, seguramente por nuestro nivel de autoexigencia, pero sin duda ha valido la pena.